Triana, la calle mayor de Las Palmas de Gran Canaria, se transformará desde hoy y hasta el próximo 16 de enero, en una galería de arte al aire libre con siete de las grandes obras maestras de Auguste Rodin, uno de los escultores más importantes de todos los tiempos, considerado como "el primer moderno" del arte. .
La exposición, que organiza la Obra Social de la Caixa, con la colaboración del Ayuntamiento de Las Palmas de Gran Canaria y el Musée Rodin de París, se inaugurará hoy, a las 13.00 horas, con un acto solemne en el que serán descubiertas las lonas que desde ayer cubrían a estas siete obras. Cada escultura llevará, además, un panel explicativo sobre el significado de El pensador y de los 6 burgueses Jean d'Aire, Jacques de Wisant, Jean de Fiennes, Andrieu d'Andres, Pierre de Wissant y Eustache de Saint Pierre que, arriesgando sus vidas, entregaron las llaves de su ciudad al rey de Inglaterra, Enrique III, como símbolo de rendición en la Guerra de los Cien Años.
Rodin, que había estudiado anatomía para usar el cuerpo humano como una herramienta de expresión de la psicología y los sentimientos humanos, plasma en estas esculturas muchas de sus líneas maestras, ya que pertenecen a una segunda etapa del artista, considerada como trascendental en la escultura.
El mundo del arte ha recibido de forma positiva la experiencia en todos los niveles. Así, el pintor y arquitecto Félix Juan Bordes señala que una obra como El pensador, la cual considera como la más importante de Rodin junto a El beso, evoca "al hombre frente a la naturaleza, al hombre con un deseo de verse dentro de si mismo y no saber nada más del mundo". Según el arquitecto, "para un isleño es más cercano porque esa sensación de aislamiento le obliga a evocar nuevos mundos detrás del horizonte y encontrar un mundo más libre y paradisiaco".
El escultor Leopoldo Emperador opina que siempre es una buena iniciativa colocar obras de arte en la calle para que la gente se eduque en la cultura. Emperador recuerda que "la obra de Rodin es importantísima, aunque yo echaría de menos el retrato de Balzac, porque inaugura la modernidad, y es cuando el cuerpo se convierte en peana de la cabeza". El escultor añade que "convivir con la belleza es estupendo y sirve para el proyecto de capitalidad cultural de 2016".
El también escultor Juan Antonio Giraldo define a Rodin como "un artista que rompió con todos lo cánones". Giraldo destaca el conjunto de Los burgueses de Calais, ya que es "muy interesante desde el punto de vista dramático y está muy bien resuelta". Giraldo apuesta porque esta iniciativa se extienda a artistas como Henry Moore, Baltasar Lobo o Pablo Serrano.
Otro escultor, Juan E. Correa, añade que la iniciativa de llevar las obras a la calle Triana es positiva y recuerda que gracias a Rodin se marcaron las pautas de la abstracción en la escultura. Correa recuerda que cuando la obra de Rodin cobra una entidad brutal es, precisamente, cuando se conjugan todas las piezas, destacando "las expresiones rompedoras de las manos".
La historiadora del arte Ángeles Alemán define al escultor francés como un artista extraordinario y destaca Las Puerta del Infierno, ya que inauguró la modernidad. "Hoy en día redescubir a Rodin está muy bien porque los que decidimos estudiar las vanguardias a veces nos olvidamos de su obra". Para Alemán, llevar el arte a la calle es muy positivo para todo el mundo y para que "en una época de crisis se pueda disfrutar de esto es estupendo".
Finalmente, el crítico Jonathan Allen recuerda que Rodin no fue sólo un expresionista genial, sino un gran técnico que inventó máquinas reductoras y adelantó los conceptos de fundición. "Fue un hombre-fábrica a la usanza de los grandes del Renacimiento" y recuerda que Rodin hizo de la fotografía el principal vehículo de su difusión. "Preocupado por la historia, el artista conjugó imaginario colectivo e imaginación individual", señaló.