Laura Medina, Reina del Carnaval del cómic
El diseñador Fernando Méndez con la
fantasía "Acompáñame... una noche más" se hizo de nuevo con el preciado
galardón entre personajes de cómic, superhéroes y villanos
La corona que los superhéroes recuperaron de los villanos al
comenzar la Gala de la Reina, ya tiene nueva propietaria. Laura Medina
con la fantasía Acompañame...una noche más, diseño de Fernando Méndez
representando al CC Alcampo Telde ha sido la sirena elegida para reinar
en los festejos de Las Palmas de Gran Canaria. La votación del público
confirmó la opinión de las tres mesas de jurado que coronaron a la
candidata.
El jurado premió como primera dama de honor a Isabel Marichal, del CC El Muelle, con la fantasía "Ha nacido una estrella" del diseñador Willie Díaz; en segundo lugar se galardonó a Miriam Ramírez Robayna, candidata de Seguridad Integral Canaria, con diseño de Julio Vicente; tercera dama resultó elegida Ana Isabel Gil, en representación de Depilación Láser Canarias, y finalmente, la cuarta dama fue Cristina Rasmunssen, que representó al Parque Comercial de Jinámar, Las Terrazas y El Mirador, con diseño de Gran Canaria Diseños y Alberto Robaina.
Una historieta para releer. El cómic del escenario de Santa Catalina fue pura fantasía carnavalera, la multitud de personajes y protagonistas que propiciaba el tema de las carnestolendas capitalinas permitieron que sobre el escenario se desarrollara una historia redonda. Mientras los personajes más jóvenes como Mafalda o Zipi y Zape se sentaban a escuchar la historia y eran dibujados en escena por hábiles artistas, no faltó el espacio durante la Gala de la Reina para un tesoro a cuidar, la corona, para las pobres víctimas, para una villana que se encargó de robarla y para los superhéroes que consiguieron devolverla al escenario para que pudiese ser entregada a su nueva dueña.
Las diez candidatas pudieron desfilar y estrenar la pasarela del nuevo diseño de escenario que permitió que el público pudiera disfrutar desde mucho más cerca de los diseños y que la Gala de la Reina pudiera ganar agilidad y dinamismo. Entre bambalinas, carreras, prisas y muchos nervios, pero ni un sólo error en la noche más importante de los festejos del Carnaval de la capital grancanaria. Y las
comparsas pusieron también el ritmo y sabor carnavalesco, llenando de color el escenario.
Sobre el escenario una Eva González que se deshizo de elogios hacia la ciudad y hacia los canarios, vestida de rojo, eclipsó sin duda a Carlos Castilla. "Me habeís hecho sentir el verdadero carnaval, yo me siento carnavalera", aseguró la modelo.
Rosario Flores aportó la nota emotiva de la noche dedicando su actuación a los herreños y concluyéndola con un No dudaría, que emocionó al público, pero sin dormirlo. El calor fue subiendo con la batucada de las comparsas del Carnaval a ritmo de La Trova, pero el público, que abarrotó Santa Catalina pero con muy pocos disfraces, hizo suyo el carnaval con la llegada de todas las murgas, que se subieron al escenario por una vez sin rencores a realizar el homenaje murguero.
Y el termómetro subió hasta el infinito, a pesar del viento y las gotas que ya se dejaban notar en el parque Santa Catalina cuando Carlos Baute se subió a ese escenario y agradeció de corazón a Canarias ser los verdaderos responsables de la internacionalización de su carrera. "La fiesta no está terminando, ¡la fiesta acaba de comenzar!", clamó el cantante venezolano y el público le siguió enloquecido.
Lo mejor, un año más, el desfile de las fantasías de las chicas, diez maravillosos trajes que, a pesar de los recortes presupuestarios por la crisis, brillaron por sí mismos en Santa Catalina. Lo más divertido de la noche, el reparto de puntos a lo Eurovisión, que un año más mantuvo a todos histéricos, tanto en casa como en el parque.
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La Provincia
El jurado premió como primera dama de honor a Isabel Marichal, del CC El Muelle, con la fantasía "Ha nacido una estrella" del diseñador Willie Díaz; en segundo lugar se galardonó a Miriam Ramírez Robayna, candidata de Seguridad Integral Canaria, con diseño de Julio Vicente; tercera dama resultó elegida Ana Isabel Gil, en representación de Depilación Láser Canarias, y finalmente, la cuarta dama fue Cristina Rasmunssen, que representó al Parque Comercial de Jinámar, Las Terrazas y El Mirador, con diseño de Gran Canaria Diseños y Alberto Robaina.
Una historieta para releer. El cómic del escenario de Santa Catalina fue pura fantasía carnavalera, la multitud de personajes y protagonistas que propiciaba el tema de las carnestolendas capitalinas permitieron que sobre el escenario se desarrollara una historia redonda. Mientras los personajes más jóvenes como Mafalda o Zipi y Zape se sentaban a escuchar la historia y eran dibujados en escena por hábiles artistas, no faltó el espacio durante la Gala de la Reina para un tesoro a cuidar, la corona, para las pobres víctimas, para una villana que se encargó de robarla y para los superhéroes que consiguieron devolverla al escenario para que pudiese ser entregada a su nueva dueña.
Las diez candidatas pudieron desfilar y estrenar la pasarela del nuevo diseño de escenario que permitió que el público pudiera disfrutar desde mucho más cerca de los diseños y que la Gala de la Reina pudiera ganar agilidad y dinamismo. Entre bambalinas, carreras, prisas y muchos nervios, pero ni un sólo error en la noche más importante de los festejos del Carnaval de la capital grancanaria. Y las
comparsas pusieron también el ritmo y sabor carnavalesco, llenando de color el escenario.
Sobre el escenario una Eva González que se deshizo de elogios hacia la ciudad y hacia los canarios, vestida de rojo, eclipsó sin duda a Carlos Castilla. "Me habeís hecho sentir el verdadero carnaval, yo me siento carnavalera", aseguró la modelo.
Rosario Flores aportó la nota emotiva de la noche dedicando su actuación a los herreños y concluyéndola con un No dudaría, que emocionó al público, pero sin dormirlo. El calor fue subiendo con la batucada de las comparsas del Carnaval a ritmo de La Trova, pero el público, que abarrotó Santa Catalina pero con muy pocos disfraces, hizo suyo el carnaval con la llegada de todas las murgas, que se subieron al escenario por una vez sin rencores a realizar el homenaje murguero.
Y el termómetro subió hasta el infinito, a pesar del viento y las gotas que ya se dejaban notar en el parque Santa Catalina cuando Carlos Baute se subió a ese escenario y agradeció de corazón a Canarias ser los verdaderos responsables de la internacionalización de su carrera. "La fiesta no está terminando, ¡la fiesta acaba de comenzar!", clamó el cantante venezolano y el público le siguió enloquecido.
Lo mejor, un año más, el desfile de las fantasías de las chicas, diez maravillosos trajes que, a pesar de los recortes presupuestarios por la crisis, brillaron por sí mismos en Santa Catalina. Lo más divertido de la noche, el reparto de puntos a lo Eurovisión, que un año más mantuvo a todos histéricos, tanto en casa como en el parque.
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